Desde niño, Tomás Franzoi se destacó por su talento y creatividad a la hora de moldear arcilla y madera. “Según me cuentan las maestras, en la escuela tallaba las tizas”, recordó como una anécdota.

Hoy, sus obras se pueden encontrar tanto en Argentina como en otros países de América, Europa y Asia.

Seguí leyendo esta nota en las págs. 20-21 de la Edición Nº11 de la Revista institucional del CICA.